¿Cómo es posible que al ver una película se desencadenen en nosotros emociones? Nos agitamos, sudamos, nos palpita muy rápido el corazón… Por lo tanto tenemos un enfrentamiento ente las emociones y lo que creemos; se trata de una relación entre comprender el arte y sentirlo.
Pero, ¿qué es una emoción? Una emoción es un estado compuesto por una actitud (positiva o negativa) hacia algo o alguien. Es una motivación por una creencia, por ejemplo: creer que un oso es peligroso te produce un sentimiento hacia él: miedo, temblor, cosquilleo… etc.
En el caso de la ficción encontramos una paradoja; nos surgen unas emociones hacia esos objetos, personas, creencias, sensaciones… Pero ¿cómo puedo creer que Drácula es peligroso, si Drácula no existe?
Ahora debemos pensar en cómo explicar esta paradoja; las personas no tenemos emociones reales, tenemos lo que se conoce por cuasi-emociones, por tanto no somos completamente racionales. Un ser racional sería aquel que siente emociones solamente por cosas reales,
Según Colin Radford (1975), somos irracionales; ya que tenemos emociones reales, pero esas emociones son irracionales puesto que sabemos que Drácula no existe. Pero cuando vemos ficción, nos olvidamos de que no es real.
En cambio K.Walton (1993) defiende la idea de que no sentimos emociones reales. Ante las ficciones no es que creamos las cosas sino que nos las imaginamos, la respuesta emocional se da ante lo que imaginamos. Según Walton imaginamos que hay un vampiro y que por tanto, estamos en peligro. Pero, ¿qué siento cuando imagino que estoy en peligro? No puedo sentir miedo, porque sabemos que no es real, así que lo que se siente es una cuasi-emoción. No nos comportamos igual cuando tenemos miedo a algo real que cuando lo tenemos a algo imaginario.
Por último; D.Matravers dice que todas las emociones que sentimos son reales sin excepción alguna; pero que lo que varía es nuestro comportamiento hacia esa emoción. Por lo que hay una conexión entre el valor que nosotros le demos a ese miedo y las emociones que surgen en nosotros hacia él. Por tanto, sentimos emociones reales y somos racionales. No es necesario que tenga la creencia de que Drácula existe para que mi miedo esté justificado o sea racional. Sentimos emociones ante cosas que imaginamos o pensamos. El pensamiento de que algo te puede pasar o hacerte daño es suficiente para sentir miedo.
Esto cambia nuestra teoría de las emociones.
La tercera explicación es la que más se acerca a lo que pasa en la conciencia. Su problema es que en muchos casos si eso lo hiciéramos de manera sistemática nos comportaríamos irracionalmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario